lunes, 21 de julio de 2014

A MORLITA QUAN



Pálido fuego. Nívea albura ardiente.
Grises satinados deslizados en tu piel ignota…
¿Cómo entrar en el resplandor de tu mente?
¿Cómo no convertir el intento en anunciada derrota?

Abismo negro en tu mirada de hada
en cuyo fondo laten lunas y un torrente.
¿Cómo desviarla sobre mí? ¿Cómo capturarla?
¿Cómo retener ese brillo incandescente?

¿Cómo no olvidar la ortopedia de tus pasos?
¿Cómo no sentir pasión por tu soñar de diosa?
¿Qué hacer para estrechar los lazos
que aten mi oscuridad a tu luz gloriosa.

Mover los firmamentos por tenerte.
Ofrecer tributos al diablo-
Regalar el alma por verte
lucir una sonrisa si te hablo.
Ignorar los peligros del fracaso-
Tropezar cien veces si hace falta.
Admirar tus obras, reverente.

Querer volar junto a ti muy alto-
Unirme a tu viaje en cada caso.
Atrapar tus manos y tu mente…
Navegar por tu cielo paso a paso.


R.B.

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